El término IoT se proviene del inglés «Internet of Things», lo que significa, el internet de las cosas. Se le llama así a la capacidad de los objetos físicos de interconectarse con la finalidad de intercambiar y transmitir datos a través de una red inalámbrica.

El Internet de las cosas puede aplicarse a prácticamente cualquier objeto de nuestro día a día tanto doméstico como industrial. Esto nos permite una obtención de datos de manera ágil y certera.

¿Cómo funciona la IoT?

Los objetos físicos, dispositivos electrónicos y aparatos que utilizas a diario disponen de software, sensores o aplicaciones que permiten establecer una interconexión entre ellos. Como resultado, se obtienen objetos inteligentes capaces de transmitir datos de forma inmediata a través de Internet.

Como usuario de estos dispositivos inteligentes, experimentarás el beneficio de tener al alcance de tu mano la capacidad de seleccionar lo que deseas, cómo lo deseas y cuándo lo deseas.

Estos objetos siguen un programa que les permite llevar a cabo acciones basadas en los datos recopilados. Por ejemplo: si tienes una lámpara inteligente que puede conectarse a una aplicación en tu teléfono móvil, puedes indicarle que se encienda o apague según tus preferencias.

IoT en las empresas

La posibilidad de obtener un buen análisis de datos en tiempo real, nos abre un mundo de oportunidades. Tener ese conocimiento tan específico de los datos que genera cada empresa permite a sus directores y dueños crear sistemas y nuevas fuentes de ingresos.

Los dispositivos con IoT pueden ser utilizado en cualquier tipo de empresa y sin importar el tamaño que tenga. Estos dispositivos pueden ir desde minúsculos sensores hasta grandes equipos, todos tienen la misma finalidad de crear información relevante que ayude a la hora de mejorar los procesos, reducir los costes o encontrar nuevas fuentes de ingresos, entre otros propósitos.

El famoso Internet de las cosas, apareció hace tiempo impactando en diversas áreas de manera simultánea, cada vez se utiliza más en el día a día ya que ayuda a tener una vida más eficiente, cómoda y productiva. Esto está en constante evolución y sus aplicaciones son infinitas.

 

¿A qué esperas para adentrarte más en las IoT?